martes, 18 de octubre de 2011

El Veto De Lo Natural


    Que sarcástico puede llegar a ser el ser humano cuando se escandaliza al visionar una escena de sexo, que es televisada en horario infantil, y, sin embargo apenas se inmuta cuando se humilla y martiriza, con un sadismo que mi joven cordura no llega a asimilar, a un indefenso astado. Y es que, le pese a quien le pese, la tauromaquia, amen de ser una deleznable actividad legal, sigue estando al alcance de los niños cual fármaco olvidado en la mesa de la cocina. Lo que se intenta mostrar tras la máscara que crea la palabra “Arte”, cuando es usada incorrectamente, no es más que una violación del principal derecho de todo ser viviente; el derecho a la vida.

   No consigo comprender porque vetamos a los niños de ver algo tan natural como es el sexo, y sin embargo, nos despreocupamos si el pequeño está viendo una corrida de toros en la caja boba.
    
 Pero bueno, supongo que lo más fácil, siempre, es cambiar de canal y hacer caso omiso.

PD: Esta es la carta que hace unos meses decidí enviar a: El Correo, y que como ya me supuse no me publicaron. Hoy la comparto con quienes me lean, y a su vez sigo lanzando otro grito de:

ABOLICIÓN




Karl